Tras tres años de caída, debido a la crisis económica española, las ventas minoristas sufren un desplome histórico que se ha traducido en un gran número de cierres de comercios, Pymes, etc. y en la destrucción diaria de empleo en un sector vital de la economía española tradicionalmente.
Esto ha llevado al secretario de Estado de Comercio a anunciar, tratando de cambiar esta situación, la puesta en marcha de un plan de choque para reactivar el tejido comercial. La concesión de créditos a través de las líneas ICO será preferente. El plan propone también el impulso del comercio electrónico, la eliminación de trabas burocráticas o la creación de fórmulas de relevo generacional para evitar el cierre de comercios tradicionales.